viernes, 12 de julio de 2013

Esa cosa llamada amor.

Hoy no quería terminar el día sin dedicaros unas palabras. Hoy es un día especial para vosotros. De hecho lo lleva siendo desde hace 15 años. Y este año lo "celebro" con vosotros, a mi manera. Os conozco desde hace dos añitos y creo que nunca había respetado tanto a dos personas como a vosotros. Y digo respetar porque tanto por separado, como juntos sois personas increíbles y dignas de admirar. Y por supuesto, ojalá encuentre yo algo así. Porque el amor que hay entre vosotros se ve a la legua. Porque sé cuantísimo te quiere él (sobretodo porque es un nenaza y lo dice mucho jajaj) y porque vuestra pequeña es el reflejo de vosotros y ¡es maravillosa!

Una vez te lo dije  y te lo vuelvo a decir, espero encontrar algo así algún día y formar una familia tan preciosa como la que tenéis vosotros. Porque de verdad que el apoyo, el ánimo, la compañía, la fuerza, el valor, la alegría y la magia que lleváis no se la vi nunca a nadie. Sois muy especiales y juntos hacéis el mejor equipo nunca visto...

Os deseo muchísimos años, toda una vida llena de amor, alegría, aire y buenos momentos. Y yo que pueda verlos y vivirlos con vosotros. Me siento una privilegiada por conoceros y de nuevo mil millones de gracias por estar absolutamente en todo momento a mi lado. Por llorar y sonreír conmigo, asustaros y alegraros por mí.


¡Felicidades pareja!

domingo, 7 de julio de 2013

22 anys de lluites clavades al cor...

          Hoy, hace dos años, exactamente a las doce y pico de la mañana de un jueves de mercadillo, recibí la llamada que podía cambiar mi vida y, que de hecho, cambió.

San Fermín debió echarme el ojo y ¡decidió echarme una manita también! Me trasplantaron y los 3 meses siguientes fueron física y mentalmente los más dolorosos de mi vida. Al mismo tiempo, los más esperanzadores. Porque de verdad creía que ya acababa todo. No es que fuera ingenua, sabía que los problemas no acababan ahí, porque la F.Q no da tregua alguna, pero de verdad que confiaba en esa segunda oportunidad. Salí y viví por fin. Fueron dos años maravillosos, llenos de dolor y sonrisas. Sustos y más sustos. De desayunos, de amor, de pasteles y sueños cumplidos. Oportunidades de elegir, cuantísimo tiempo levaba sin poder elegir... Casi 730 días de aire si todo no se hubiera truncado de esta manera.
 
Sobre las 18h entre en quirófano para dormir profundamente. Lo hice pensando en tonterías, de hecho, cuando desperté me enfadé un poco conmigo misma porque es que no dije nada bonito ni hice ningún discurso de despedida para mi familia y amigos. Simplemente le dije a mi cirujano Juan Escrivá que cumpliera bien con su trabajo, manda huevos. (En realidad pensaba: como me muera pienso venir en forma de fantasma).
 
Esta vez, estoy despierta todo el día, otro año más y doy las gracias a mi donante por ello. Hice cálculos, y repartiendo su vida entre sus órganos me he adjudicado, con todo el respeto del mundo, un 0,5 de su vida. Así que hoy por hoy vivo 1’5 vidas y si la suerte está de mi lado dentro de un tiempo seré 1,75…
   
Cada unas de las dieciséis cicatrices que recorren mi cuerpo cuentan algo de mí y me recuerdan, día tras día, lo que he sufrido. Cada uno de mis tatuajes está lleno de esperanza y millones de emociones y me hacen ver que por cada cicatriz hay una nueva superación y un nuevo sentimiento de victoria y orgullo. Y amo tanto unas como otros.

Dos años largos y tan cortos…dos años que espero poder alargar, sea de la forma que sea, porque tengo mil sueños por cumplir aun, cicatrices que superar y tatuajes que hacerme.

Así que esperaremos, celebraré este día con una rica tarta y con mi familia y seguiré pegando bocados al aire hasta que llegue, de nuevo, mi gran momento.



 
Inspira, la vida al món t’espera.

miércoles, 3 de julio de 2013

No lloras por ser débil, sino porque llevas mucho tiempo siendo demasiado fuerte.

Miedo. Me cuesta decir esa palabra, reconocerla como mía, aceptarla dentro de mí. Pero, cuanto antes la asimile y la haga mía, antes podré cambiarla por otra muy distinta que le hará una grandísima competencia. Valor.

Hoy no voy a hablar en general. No voy a decir que tengáis valor para enfrentaros a vuestros miedos. Sintiéndolo mucho voy a ser egoísta (palabra por cierto asociada siempre a un significado negativo y no tiene por qué, ya que cuando ayudamos a alguien terminamos sintiéndonos mejor y eso nos gusta por lo tanto dentro de ese contexto somos egoístas). Hoy necesito todo mi valor, mis consejos y mis palabras para mí. Porque la cosa se complica de una forma que nunca imaginé. Porque por esa dichosa puerta de color gris oscuro sólo entran malas noticias...y necesito que entre aire fresco. Aire nuevo que sane mis pulmones y les devuelva la vida que están perdiendo tan rápido. Oportunidades que me den fuerzas, necesito dos nuevas alas para seguir volando.

Hoy al verte se me fue el alma a los pies, Pedro. Porque me entiendes mejor que nadie, porque eres parte de mí y quiero decírtelo sin esconderme detrás de frases sin destinatario directo en redes sociales. Lloramos juntos porque sabemos que esto es una locura que parece no acabar nunca. Y queremos que acabe. Necesitaba (con permiso de Jorge Bucay hoy usaré mucho ese verbo tan mal usado a menudo) ese abrazo, esas lágrimas. Quería ese abrazo de ti, mi hermano, mi compañero. Sólo tú sabes de verdad lo que es no sentir oxígeno en tus pulmones, notar cómo se te va la vida y el pánico a perderlo todo.

Hoy he visto llorar a dos de las personas más importantes de mi vida. Llorar por mí, por ellos, por el cansancio, por la lucha y por el dolor. Y no sabéis lo horrible que es ver sufrir a los que tanto te quieren. Algo se deshace dentro de ti, te golpea, sin avisar. Se rompe y sale todo como un torrente de tristeza y sensación de injusticia. Los abrazo e intento trasmitirles parte de mi fuerza. Decirles que no tengan miedo, que lucharás hasta la saciedad y harás lo necesario para aferrarte a la vida. Porque sólo ver el sol por las  mañanas ya merece la pena, porque quieres respirar hasta romper el aire y sobretodo quieres que ellos lo vean y sean felices contigo.

Hoy mis palabras, mis mejores deseos, mis ánimos, mis sonrisas, mis fuerzas...me las dedico todas a mí. Egoísta que quiere vivirlo todo.